La Reserva Federal estadounidense dejó sus tasas de interés sin cambios como esperaba el mercado, pero advirtió de una mayor “incertidumbre” en Estados Unidos y degradó sus pronósticos de crecimiento e inflación.
Washington, Estados Unidos AFP
Dos meses después del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, la Fed mantuvo sus tasas en un rango de 4.25%-4.50%.
Pero “la incertidumbre sobre las perspectivas económicas aumentó”, según el comunicado del banco central. En una conferencia de prensa posterior a la nota, el presidente de la Fed, Jerome Powell, precisó que es “inusualmente alta”.
En este contexto, la Fed redujo su previsión de crecimiento en el 2025 a 1.7% y aumentó la de inflación a 2.7%.
Antes preveía un crecimiento de 2.7% este año y 2.5% de inflación.
Aranceles
Para el desempleo también hubo una corrección del pronóstico, desde 4.3% a 4.4%.
Powell afirmó que la inflación comenzó a repuntar en EE. UU. en parte debido a los aranceles decretados por el presidente Donald Trump.
Recesión
“Claramente algo de ella (de la inflación), buena parte de ella, proviene de los aranceles”, sostuvo Powell, quien añadió que “puede haber cierto retraso en un mayor incremento” inflacionario en lo que resta del año.
En este contexto, el riesgo de recesión en EE. UU. aumenta, pero no es alto, afirmó.
“Si retrocedemos dos meses, la gente decía que la probabilidad de una recesión era baja. Así que ha aumentado, pero no es alta”, declaró.
Desde la última reunión de la Fed en enero, el panorama cambió mucho.
Las empresas deben afrontar nuevos aranceles, los consumidores deben vigilar sus compras y los inversores dudan de que EE.UU. pueda salir indemne de las medidas de Trump.
Además de su ofensiva arancelaria marcada por permanentes idas y vueltas, Trump puso a Elon Musk a recortar puestos en el Estado federal y reducir gastos.
Hasta este momento, con una economía floreciente y una tasa de desempleo débil, la Fed se enfocó en luchar contra la inflación, que se mantiene por encima de su meta de 2%, en 2.5% a 12 meses en enero, según su índice favorito, el PCE.
Catástrofes
Las iniciativas del mandatario dejaron perplejo, incluso al economista Michael Strain, del centro de estudios conservador American Enterprise Institute, favorable a varios aspectos del programa del republicano.
Ahora califica de “catástrofe” su gestión económica.
“Antes era inconcebible que un presidente, incluyendo Trump durante su primer mandato, hiciera deliberadamente tanto daño a la economía”, sostuvo en su blog. “Afortunadamente, heredó una economía sólida”, reflexionó.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, no descartó que el país pueda caer en una recesión y consideró “saludables” las correcciones que está habiendo en la bolsa por esta preocupación.