Cusco mística ciudad sagrada, considerada la capital del Imperio Tahuantinsuyo con un gran legado histórico y arquitectónico. Rodeada de valles verdosos con imponentes atractivos turísticos, cultura, tradición y fe aún latente. Conocida como el ombligo del mundo por ser el centro político y territorial del Imperio Incaico, el departamento de Cusco nos muestra una impactante variedad geográfica desde naturales cordilleras y relieves, hasta ríos como el Urubamba.
Machu Picchu
Machu Picchu es una ciudad inca rodeada de templos, andenes y canales de agua, construida en lo más alto de una montaña. Su construcción fue edificada con grandes bloques de piedra unidas entre sí, sin el uso de amalgama. Actualmente es considerada patrimonio cultural de la humanidad al ser reconocida como importante centro político, religioso y administrativo de la época incaica.
Construida en el siglo XV, posiblemente a pedido del inca Pachacuteq, Machu Picchu está dividida en dos grandes sectores: el agrícola que comprende una vasta red de andenes o terrazas artificiales y el urbano, formado por diversas construcciones y plazas entre las cuales destacan el Templo del Sol, Templo de las Tres Ventanas, el Templo Principal y el Templo del cóndor.
Sus construcciones siguen el estilo clásico inca: edificaciones con muros de piedra pulidos en forma rectangular, unidas entre sí sin el uso de amalgamas, puertas y ventanas trapezoidales.
El Valle Sagrado de los Incas
Entre imponentes paisajes de vasta vegetación y ciudades que mantienen su cultura intacta, el Valle Sagrado muestra a sus visitantes la variedad de flora, clima amigable y recursos naturales que posee. En tiempos del Tahuantinsuyo fue el centro de la civilización cusqueña, convirtiéndose así en una importante fuente de alimentación para los antiguos incas. Esta ciudad se ubica dentro de la provincia de Urubamba y está rodeado de imponentes quebradas.
El Valle Sagrado está situado entre altas montañas que enmarcan un colorido manto de campos de cultivos, acompañado de pueblos pintorescos y un esplendoroso río. Sus innumerables sitios arqueológicos, construidos en tiempos del incanato lo han convertido en el lugar preferido de los turistas. Reconocido por ser el principal centro de producción agrícola en tiempo de los Incas.
La Ciudad de Cusco
Al recorrer las calles de la ciudad del Cusco, sus enormes muros y palacios construidos por los Incas exhiben la colosal arquitectura de la capital del Tahuantinsuyo. Cuando los conquistadores españoles llegaron a este territorio, emplearon como base las construcciones incas de piedra sobre piedra y edificaron sobre ellas iglesias, conventos, casonas, lo que formó una simbiosis peculiar que aportó un carácter único a esta ciudad imperial que fue declarada en 1983 como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
La gran cantidad de Arte Virreinal que se observa por toda la ciudad, principalmente formada por pinturas religiosas con marcos en pan de oro, nos transporta a una época en la que el encuentro de la cultura andina y española dio como resultado la afamada Escuela Cusqueña.
Herederos de este arte son los artistas que habitan en las casas talleres del tradicional Barrio de San Blas, que expresan a través de sus pinturas, esculturas y diversas artesanías lo más representativo del arte cusqueño.
La Montaña de 7 Colores
La montaña de los 7 Colores (también llamado Vinicunca o simplemente ‘arcoíris’) es una de las nuevas y mejores atracciones del Perú. Ubicada a más de 100 kilómetros de la ciudad del Cusco, en una cumbre altitudinal situada a 5,200 metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m.) Se trata de una formación montañosa teñida de varias tonalidades producto de la compleja combinación de minerales. Las laderas y la cumbre están teñidas de diversos tonos que incluyen el rojo, morado, verde, amarillo, rosado y otras variaciones. Este atractivo turístico estuvo rodeado de hielo hace no muchos años. Desde el 2016, este lugar recibe a cientos de visitantes al día convirtiéndose, junto con Machu Picchu, en uno de los lugares más visitados en Cusco, Perú.
La Laguna Humantay
Si lo tuyo es disfrutar de la naturaleza y el trekking, este lugar es ideal. Humantay, es una montaña revestida de nieve que forma parte de la cordillera andina y da origen a la formación de esta espléndida laguna que, por su singular color turquesa, genera el interés de visitantes extranjeros y nacionales. La caminata hacia el lugar te hará sentir una sensación de paz y tranquilidad gracias a su belleza natural con la que te toparás.
Con un aire místico, la laguna es visitada por chamanes y turistas de todo el mundo para dejar ofrendas a la Pachamama, deidad que representa a la madre Tierra en la cultura Inca. Mediante la colocación de piedras (apachetas), se le brinda una ofrenda a la Pachamama agradeciéndole por haber llegado a la laguna con éxito, así como para pedirle que los acompañe en su recorrido.
De acuerdo a los pobladores, el nevado Humantay es el hijo menor del Apu Salkantay, y estarían encargados de racionalizar y distribuir el agua que baja de sus nieves a las poblaciones que viven a las faldas de estos impresionantes nevados.
Choquequirao
Ubicado a 3,104.09 msnm (Instituto Geográfico del Perú-2001) en lo alto de una verde montaña, en el límite de los departamentos de Cusco y Apurímac, el Parque Arqueológico de Choquequirao impresiona por la majestuosidad de la arquitectura Inca con andenes, plazas, recintos, grandes muros con hornacinas y otras construcciones.
La construcción de Choquequirao puede atribuirse a los sucesores del Inca Pachacútec, Tupac Inca Yupanqui o Huayna Cápac, entre los siglos XV y XVI. El lugar parece destinado para fines públicos y ceremoniales, con el culto al dios Sol, la tierra, el agua, entre otros. También pudo haber sido un punto de control de ingreso a la zona de Vilcabamba.
Debido a su rica flora y la fauna Choquequirao es considerada un Área de Conservación Regional por el Sistema Nacional de Áreas Protegidas por el Estado (SERNANP), con una extensión de 103,814.39 hectáreas.
Salineras de Maras
Maras es una pequeña comunidad a 40 kilómetros de la ciudad de Cusco, vía Chinchero, en un desvío de la carretera a la ciudad de Urubamba. Su principal atractivo, además de su iglesia que data de la época colonial, son las minas de sal, situadas cerca del pueblo, que cautivan a los turistas y en particular a los amantes de la fotografía. El proceso de extracción de la sal ha estado en uso desde la época precolombina y se mantiene en la actualidad por una comunidad nativa. El método de extracción empleado implica el uso de un proceso de secado antiguo, el agua salada que fluye de una corriente subterránea, se deja asolearse en miles de pozos o piscinas hasta que se haya evaporado dejando sólo la sal, que luego está lista para ser vendida o intercambiada por otros bienes. Durante los meses de verano (abril-octubre) el brillante espectáculo que ofrecen las piscinas es incomparable.
Complejo Arqueológico de Moray
Se encuentra a 57 km al noroeste de la ciudad de Cusco.
Moray está conformado por 4 galerías ligeramente elípticas, a las que los pobladores denominan «muyus». La galería mayor tiene una profundidad de 45 m y el promedio de altura de cada andén es de 1,80 m.
Para los investigadores, los andenes circulares de Moray funcionaban como un centro de investigación agrícola, donde cada nivel ofrecía un ambiente climático diferente permitiendo cultivar distintas plantas de forma experimental.
Los andenes fueron construidos sobre muros de contención rellenados con tierra fértil. Se las regaba mediante complejos sistemas de irrigación. En el fondo de los andenes, existe un sistema que almacena el agua proveniente de las lluvias. Siguiendo ésta práctica se lograron cultivar más de 250 especies vegetales.
Otros estudios indican que el lugar fue empleado para la observación astronómica y monitorear los cambios climáticos que podrían presentarse, mediante el seguimiento de la luz solar y las sombras que generadas por las altas montañas de la zona.